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El Elefante Encadenado

 hoy, me gustaría  contar una breve historia motivacional sobre:

cómo tus creencias pueden estar reteniéndote
y cómo reconocer cuando estás experimentando una sensación de impotencia aprendida en tu vida
esta historia es un ejemplo clásico de cómo las pequeñas cosas
pueden descarrilar su éxito en la vida.
así que vamos a sumergirnos en la historia y después,
compartiré algunas lecciones que puedes aprender de ella.

La historia:

un hombre Al caminar por un campamento de elefantes,
notó que los elefantes solo estaban asegurados con una pequeña cuerda atada alrededor de un tobillo.
Se preguntó por qué los elefantes no se sueltan de la cuerda,
ya que los elefantes ciertamente eran lo suficientemente fuertes para hacerlo.
Le preguntó a un entrenador por qué los elefantes no intentan liberarse,
y el entrenador respondió
diciendo que usan una cuerda del mismo tamaño para los elefantes bebés hasta la edad adulta.
Debido a que son demasiado pequeños cuando son bebés para liberarse de la cuerda,
crecen con la condición de que la cuerda es más fuerte que ellos .
Como adultos, piensan que la cuerda todavía puede sostenerlos, por lo que no intentan luchar contra ella.

La moraleja:

Los elefantes en este caso están experimentando una indefensión aprendida .
Este fenómeno ocurre cuando alguien ha sido condicionado
para anticipar el malestar de alguna manera sin tener una forma de evitarlo o detenerlo.
Después de suficiente acondicionamiento,
la persona detendrá cualquier intento de evitar el dolor, incluso si ve la oportunidad de escapar.
Si vas por la vida pensando que no puedes hacer algo solo porque no lo has hecho en el pasado,
estás viviendo con una mentalidad fija .
Tienes que dejar de lado tus creencias limitantes
para poder hacer los avances necesarios para tu éxito final.
No dejes que otras personas te digan que no puedes hacer algo
y no te aferres a la suposición de que no puedes crecer
aprender de los fracasos del pasado.

Parte Espiritual:

El miedo es un sentimiento aprendido, que  incapacita, entorpece y aniquila, y, aunque podamos comprender todo  esto, tiene tanto poder que puede llegar a absorbernos de tal manera,  que nos impide actuar libremente, nos amarra, nos ata, condicionando  nuestra mente y haciéndonos creer que somos incapaces, limitándonos y  convirtiéndonos realmente en incapaces, casi sin darnos cuenta, hasta  atraparnos irremediablemente.
Es por eso que, como dice el autor, es  mejor guiar nuestros pensamientos por nuestros deseos y nuestra fe, más  que por nuestros miedos que son muy malos consejeros y engañan nuestra  mente. Se trata simplemente de reprogramar nuestra mente y condicionarla  positivamente.
“Conseguimos lo que creemos que  tenemos la habilidad de conseguir. Levanta la barra, aumenta la apuesta,  estírate, ve por más, ¡cava más profundo!
Nos traicionamos volando demasiado a  ras del suelo, no nos permitimos atrevernos a nuevas alturas. Enfócate  en tus posibilidades, no en tus limitaciones. Atreverse a nuevas alturas  significa empujar hasta superar tus límites mentales. Explora tu mente  en busca de virus y deshazte de ellos.
Si cambias tu manera de pensar, puedes  multiplicar tu rendimiento. Permite a tus deseos guiarte, más que a tus  miedos. En lugar de discutir sobre tus limitaciones, encuentra las  formas de apoyar tu verdadero potencial. Declarale la guerra a tus  límites actuales. No te permitas limitarte en forma alguna.
¡Date el permiso de soñar, de arriesgarte, de decir SI en lugar de no! ¡Tú puedes hacer más, mucho más! ¡Dí sí!"

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